Muchos de los que hoy son felices emprendedores, en algún momento de su vida como empleados sintieron que no estaban satisfechos con lo que hacían. Por más que intentaran emocionarse al pensar en llegar a su lugar de trabajo, o en los reconocimientos y resultados positivos de la compañía, no lograban sentir esa pasión que le da sentido a tu labor. ¿Te identificas? Piensa en emprender y enamórate de tu trabajo.
Emprende y enamórate de tu trabajo
Realmente pensar en emprender nos produce pánico, emoción, duda y una serie de sentimientos que son los que precisamente se necesitan para ser feliz con tu trabajo. No nos digamos mentiras, siendo empleado sueles dejar de sentir todas estas emociones, debido a un estancamiento en la famosa “zona de confort”. Y esto puede deberse precisamente a que te limitas a una pequeña área de todo el negocio, lo cual dista mucha de la visión global, retos y recompensas que vives obtener al emprender tu negocio.
Quizás te preguntarás, ¿cómo emprender si mi salario como empleado no me alcanza para tener un capital de inversión?, o tal vez tu caso sea en el que ya estás emprendiendo pero necesitas quien te aliente. Pues bien, si tu problema es de capital, no te preocupes, por fortuna estás viviendo la era digital que facilita la comunicación y difusión de información, y por ende, el marketing y las ventas. Para no ir tan lejos, con Vikats puedes convertirte en un vendedor de ropa para mujer independiente, sin tener un local. Muestra las fotos de nuestros diseños que aparecen en nuestra tienda online y vende por pedido. De hecho, hay muchos descuentos por comprar al detal y al por mayor que pueden ayudarte a obtener buenas ganancias, hasta instalarte en tu local en poco tiempo.
Ahora, si en tu caso ya estás inmerso en el mundo de los emprendedores pero necesitas reencontrar la pasión y amor por tu sueño de emprendimiento, no temas. Es normal que el cansancio y a veces la frustración confunda los motivos por los que iniciaste en este camino.
El truco está en recordar lo que sentías antes de emprender. La idea de estar sujeto a un horario, la subordinación, poca o nula participación en las decisiones, y sentir que no tienes control del rumbo de tu vida laboral, pueden ser solo algunos de esos motivos que te hagan aferrar cada vez más a tu idea de emprendimiento.
Por qué lo haces, para qué lo haces, por quién lo haces, suelen ser esas preguntas que también reviven esa chispa y fuerza interior, que te inspira y mueve con determinación hacia el éxito de tu negocio. No olvides que al emprender todo el tiempo, esfuerzo, dedicación e inversión es para cumplir tu sueño y no los sueños ajenos.
Como estas puede haber muchas razones por las que emprender logra que encontremos el amor por el trabajo, a tal punto que deja de sentirse como un trabajo para pasar a ser una pasión. ¡Emprende tu negocio y verás que así es fácil sentir amor por tu trabajo!
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